Ah-Kin o Ak-Kin es nombre que recibe el dios maya del Sol. También es el nombre que se le daba en la época precolombina a los sacerdotes mayas. Tiene una representación dual: es tanto el joven consorte de la diosa de la Luna (Acna), como el anciano sol en el cielo diurno. Durante la noche recorre el inframundo, esperando que llegue el alba.
Ah-Kin es reconocido como protector contra los males y demonios asociados con la oscuridad. También se le reconoce como un dios sanador, y que atrae esposas para los jóvenes casaderos. Los antiguos mayas le rezaban al amanecer, quemando incienso para recibir sus bendiciones.
El sol representa vida, energía y el cuidado de uno mismo. Es por ello que elegimos a esta deidad para nombrar nuestro proyecto. Quienes formamos parte de Ah-Kin (alumnos y maestra) estamos comprometidos con el cuidado de nuestro cuerpo y salud en general, ya que, a fin de cuentas, es el espacio en el que habitamos todos los días. ¿Por qué no mantenerlo siempre sano, contento y en buenas condiciones?
Ah-Kin es reconocido como protector contra los males y demonios asociados con la oscuridad. También se le reconoce como un dios sanador, y que atrae esposas para los jóvenes casaderos. Los antiguos mayas le rezaban al amanecer, quemando incienso para recibir sus bendiciones.
El sol representa vida, energía y el cuidado de uno mismo. Es por ello que elegimos a esta deidad para nombrar nuestro proyecto. Quienes formamos parte de Ah-Kin (alumnos y maestra) estamos comprometidos con el cuidado de nuestro cuerpo y salud en general, ya que, a fin de cuentas, es el espacio en el que habitamos todos los días. ¿Por qué no mantenerlo siempre sano, contento y en buenas condiciones?